miércoles, 20 de agosto de 2008

Edvard Grieg

Edvard Hagerup Grieg (1843 - 1907), pianista y compositor noruego.
Grieg es considerado como un compositor Nacionalista.
Sus primeros trabajos incluyen una “Sinfonía en do menor” y una “Sonata para piano en mi menor Op. 7”.También escribió tres sonatas para piano y violín, y muchas pequeñas obras para piano — por esto algunos lo llamaron el Chopin del Norte —, a menudo inspirado en danzas y canciones populares de Noruega, los fiordos y paisajes de su país y el dialecto Hadangar.
Entre las obras más conocidas encontramos el Concierto para Piano en La menor, la Suite Holberg (para orquesta de cuerdas, y diez volúmenes de piezas líricas (para piano). Él también es conocido por su música incidental, compuesta por pedido de Henrik Ibsen para su obra literaria Peer Gynt.

domingo, 13 de julio de 2008

Instrucciones para cantar - Julio Cortázar

Empiece por romper los espejos de su casa, deje caer los brazos, mire vagamente la pared, olvidese. Cante una sola nota, escuche por dentro. Si oye (pero esto ocurrirá mucho después) algo como un paisaje sumido en el miedo, con hogueras entre las piedras, con siluetas semidesnudas en cuclillas, creo que estará bien encaminado, y lo mismo si oye un río por donde bajan barcas pintadas de amarillo y negro, si oye un sabor pan, un tacto de dedos, una sombra de caballo. Después compre solfeos y un frac, y por favor no cante por la nariz y deje en paz a Schumann.


viernes, 4 de julio de 2008

BANG

LA BOMBA DE TIEMPO en explosión

BANG

LA BOMBA DE TIEMPO

martes, 1 de julio de 2008

Chas chas muchachas

LA MELAZA cuerda de tambores



En el Desfile de Llamadas de este año hizo su debut "La Melaza", la primera cuerda de tambores integrada solamente por mujeres.
"La Melaza" nació en marzo de 2005, cuando un grupo de amigas se reunió en los actos por el Día de la Mujer y decidieron formar una cuerda de tambores.
El grupo está formado por 55 mujeres de entre 20 y 50 años de edad, con profesiones variadas: psicólogas, profesoras, sociólogas, publicistas y hasta una carpintera conforman la agrupación que se cnvirtió oficialmente en la primera cuerda de tambores femenina en concursar en las Llamada.

Tras el desfile, La Melaza obtuvo el octavo premio.

Si querés escuchar, bailar, tocar... salen todos los domingos a las 17:00 hrs, desde la escalinata (parte superior) de Blanes y Lauro Müller. Si llegas tarde, y ya salió, apronta la oreja, y anda por San Salvador hacia Bulevar Artigas.

Justicia: Virtud que inclina a dar a cada uno lo que le pertenece o lo que le corresponde.

Emilio Calatayud Pérez (Ciudad Real, 22 de diciembre de 1955) es un magistrado español, juez de menores de Granada conocido por sus sentencias ejemplares.
Sus sentencias educativas han bajado la delincuencia en Granada y han aumentado el número de menores que no reinciden en el delito. En casi 20 años, el «padrazo» ha juzgado a más de 10.000 jóvenes a los que, siempre que puede, da esa segunda oportunidad que todos alguna vez hemos necesitado.

sábado, 28 de junio de 2008

Haga un paseo sonoro y aprenda a oír

Gary Ferrington

¿Alguna vez ha notado usted cuánto tiempo pasa diariamente haciendo ruido? Hay amigos y familiares a quienes hablar. Hay música para pasar en el equipo estéreofónico, programas de televisión para entretenerlo, pasto que cortar, vajilla y ropa para lavar. Sus días están llenos de producción de sonido.
Algunos de esos sonidos son importantes en la medida en que proporcionan información útil. Otros sonidos entretienen. Pero hay otros que son el producto residual de la actividad humana y conforman el ambiente de fondo de nuestra vida cotidiana.
Resulta interesante que incluso cuando tenemos un momento de silencio para reflexionar tratemos de llenarlo con sonidos. Muchos de nosotros percibimos el silencio como hueco y vacío y esa parece ser la causa de que nos pongamos ansiosos en ausencia de sonido.
Vale la pena tomarse un tiempo para escuchar los sonidos a nuestro alrededor. Vivimos en un medio ambiente acústico lleno de sonidos sutiles y no tan sutiles que enriquecen nuestra vida cotidiana, o se apartan de ella. Prestando atención a esos hechos acústicos no sólo mejoramos nuestra apreciación de los paisajes sonoros naturales y humanos, sino que incrementamos nuestra conciencia acerca de los sonidos en peligro y de aquellos sonidos que, como hierba mala, puedan estar destruyendo el paisaje sonoro.
Todos oímos, por supuesto. Pero la audición con un propósito determinado es algo que se aprende. Practicando la audición con un fin determinado prestamos atención al paisaje sonoro que nos rodea. Un ejemplo. Deténgase durante un minuto al final de esta frase y escuche los sonidos más inmediatos a usted.
¿Qué oyó? Yo oí pasar un ómnibus urbano y un helicóptero volando. También oí pájaros, el viento, un reloj y niños jugando.
Pero lo importante es que ambos dedicamos un momento a detenernos y escuchar con un propósito determinado. Al hacerlo dimos el primer paso para abrir nuestros oídos y mente al paisaje sonoro que nos rodea cotidianamente.
Algunos sonidos pueden ser nocivos para nuestra salud personal. Aquellos sonidos que encolerizan, como el aporrear del equipo estereofónico de un vecino o el tráfico urbano nos pueden poner ansiosos e interferir en nuestro descanso. A largo plazo, el sistema cardiovascular puede verse afectado.
Otros sonidos son relajantes y nos dan un sentido de paz. Muchos piensan que el sonido de las olas del océano o una corriente de agua fluyendo proporcionan experiencias acústicas relajantes.
La audición con un propósito determinado puede convertirse en una experiencia disfrutable si se la combina con un paseo. Un paseo sonoro es algo que uno puede hacer solo o compartir con otros.
Hay solo unas pocas reglas simples que se deben respetar. En primer lugar, no está permitido hablar. El propósito es escuchar y el silencio vocal y mental propios son importantes para que el paseo sea efectivo. En segundo lugar, planifique un viaje a través de un paisaje sonoro que pueda proporcionarle en primera instancia un conjunto variado de sonidos. Más adelante busque paisajes sonoros más silenciosos, que requieran habilidades auditivas más desarrolladas. En tercer lugar, después del paseo reflexione acerca de lo que escuchó y qué afecto tuvo sobre usted.
Dónde caminar y por cuánto tiempo debería estar determinado por los intereses personales o colectivos. Algunas veces, los paseos iniciales son interesantes si se realizan en lugares en los cuales pueda escucharse una variedad de sonidos. Luego, como se indicara más arriba, escoja paseos incrementalmente difíciles que incluyan más y más silencio.
Una vez realicé un paseo en Vancouver, en la Columbia Británica, que comenzó en una calle residencial del West End, con árboles a sus costados y cantos matinales de pájaros. Luego me dirigí al paseo a lo largo de la bahía, donde podía oírse claramente el sutil sonido de las olas bañando los cantos rodados. Pasaban personas en bicicleta y haciendo deporte y también oí sus sonidos.
Salí de la bahía, entré al vestíbulo de un viejo hotel y salí por la puerta trasera. El sonido sordo de las gruesas alfombras y sillas apoltronadas creaba una sensación aural de soledad y elegancia.
Luego me dirigí a explorar la acústica del vestíbulo de un edificio de apartamentos con superficies altamente reflejantes que repetían los sonido de los movimientos del cuerpo. Un mirador lateral vacío y el sonido de una tormenta de lluvia resonando sobre el techo concluyeron el paseo, al retornar a la calle con árboles en la cual grandes gotas de lluvia se juntaban y caían de las ramas de los árboles sobre mi paraguas abierto.
Tómese entre 30 y 60 minutos para realizar un paseo sonoro. Los primeros paseos pueden resultar un poco extraños, especialmente si participa un grupo de personas. Recuerdo que en un paseo reciente los extraños pasaban junto a nuestro grupo de audición y notaban nuestro silencio. Una persona sugirió que deberíamos ser algún tipo de orden religiosa dado nuestro comportamiento en el que no hablábamos.
Cada paseo sonoro que usted haga le proporcionará nuevas experiencias. Si camina solo escriba sus reflexiones en un diario. Si está con un grupo dedique algún tiempo a expresar las experiencias compartidas. Realice el mismo paseo sonoro a diferentes horas del día o bajo diferentes condiciones climáticas. Note las diferencias en la calidad y cantidad de sonidos que escucha.
Cuanto más camine y ecuche, más va a descubrir. Los paseos sonoros no son sólo informativos, también entretienen. Siempre hay un concierto de sonidos cambiando permanentemente alrededor suyo.
Pero lo que es importante es que usted se está tomando tiempo para escuchar y para reflexionar.